Nunca diré nada que no pueda quedar como lo último que dije

Benjamin Zander es un director de orquesta, titular de la Boston Philharmonic Orchestra.

En los últimos años se ha dedicado a dar charlas sobre desarrollo personal. En febrero de 2008, dio una conferencia en TED, donde habló sobre “música y pasión”, sobre la que ya publicamos un post en el blog de No + Pálidas en setiembre del 2013 . En el 2013 la conferencia había sido vista por unos 4 millones de personas. En la actualidad ya la han visto 7,3 millones.

En aquel primer post extractamos algunos segmentos referidos al liderazgo.

En esta ocasión, queremos poner énfasis en un relato del final, en el que habla sobre la importancia de lo que decimos.

Dice:

“Realmente marca una diferencia aquello que decimos. Las palabras que salen de nuestra boca. Lo aprendí de una mujer que sobrevivió a Auschwitz, una de las pocas sobrevivientes. Fue a Auschwitz cuando tenía 15 años, y el hermano tenía ocho, y sus padres desaparecidos. Y me contó esto, me dijo, ‘Íbamos en el tren rumbo a Auschwitz y miré hacia abajo y vi que a mi hermano le faltaban los zapatos. Y le dije: ¿Eres tan tonto que ni siquiera puedes conservar tus cosas por el amor de Dios?’, como cualquier hermana mayor puede hablarle a un hermano menor. Por desgracia, fue lo último que le dijo porque no volvió a verlo nunca. Él no sobrevivió… ‘Salí de Auschwitz a la vida e hice una promesa. Y la promesa fue, nunca diré nada que no pueda quedar como lo último que dije’. ¿Podemos hacerlo?”

La charla se puede escuchar, con subtítulos en español, haciendo clic en este link.

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